Este fin de semana tuvo lugar la WTA Finals (comúnmente conocida como la «Copa de Maestras«) en Singapur. Este evento reúne a las ocho mejores jugadoras del circuita WTA, y entre ellas ha destacado la primera participación de la jugadora española Garbiñe Muguruza.
Y no lo hizo entrando «por los pelos» o debido a la ausencia de la número 1, Serena Williams, sino como la número 3 mundial y cabeza número 2 del torneo. En su grupo tuvo que enfrentarse a Angelique Kerber (ALE) y Lucie Safarova (RCH), a las que venció no sin problemas en dos sets, y a Petra Kvitova (RCH), la número 5 (ahora 6) en tres sets muy ajustados por 6-4, 4-6 y 7-5.
Llegaba invatida a semifinales y le tocaba jugar contra la segunda del otro grupo, Agnieszka Radwanska (POL). No pudo continuar con sus sueño y perdió por 6-7, 6-3 y 7-5. Su tenis dinámico y potente se vio acorralado por las dotes técnicas, la pericia y la mayor experiencia de la polaca, de tal manera que anuló su juego y la remontó el partido en los dos últimos sets.
Se acabó la temporada para ella, pero se acaba su mejor temporada en su corta carrera en el tenis profesional. Finalista en Wimbledon, en Wuhan, vencedora en Pekín y con esta notable participación en la WTA Finals se despide de 2015 como la tercera mejor tenista del mundo. Sólo habían llegado dos españolas a ese puesto previamente, Anabel Medina Garrigues en dobles y Arantxa Sánchez Vicario en individuales, la cual llegó a ser número uno. Se espera que Garbiñe siga los pasos de esta última.
Freya Igualdad 